La importancia de la distribución en los prostíbulos
Dicen que la prostitución es el oficio más antiguo del mundo, y aunque es cierto que puede ser una exageración, no hay dudas de que las trabajadoras sexuales llevan mucho tiempo entre nosotros. De hecho, es uno de los primeros trabajos en torno a la entrega de servicios que se dieron. Esto habla también de manera clara de las preferencias y los intereses de nuestros antepasados, donde el sexo era algo primordial. No se trataba solo de procrear, sino también de disfrutar de un placer excitante, como único objetivo del encuentro. Las prostitutas, ya que en su mayoría siempre han sido mujeres, han estado trabajando en diferentes lugares a lo largo de la historia. Las hemos encontrado en las calles, en las plazas y en los caminos, esperando al paso de los viajeros, pero también en edificios preparados para este tipo de servicios. Las manceberías, los burdeles y prostíbulos, tienen siglos de antigüedad, y han conformado el espacio de trabajo de las prostitutas, y por tanto, también el de placer de sus clientes.
Este punto es más importante de lo que parece, porque a lo largo de la Historia muchas grandes decisiones políticas y sociales se han tomado entre las paredes de un burdel. Puede sonar extraño, pero hace siglos estos lugares eran muy visitados por los hombres más potentados y poderosos de las ciudades y villas. Desde el antiguo Imperio Romano hasta la Segunda Guerra Mundial, los burdeles eran lugares de dispersión, donde los hombres podían no solo disfrutar, sino también relajarse. En un ambiente distendido como este, las charlas, los tratos, estaban a la orden del día. Conseguir esa comodidad en los clientes era crucial, y no se limitaba solo al trabajo de las meretrices. De hecho, los burdeles solían tener una distribución muy enfocada a la comodidad de los hombres, pero también a la discreción. El detalle de cómo distribuir las estancias puede parecernos nimio en un lugar en el que todos van a disfrutar de un rato de placer, pero tiene su importancia, como vamos a ver en este artículo. Además, esas distribuciones han ido cambiando y evolucionando según la época, el lugar y sobre todo, el tipo de local del que estemos hablando.